Libere la fuerza máxima con el acero al tungsteno
El wolframio es un metal excepcional con una extraordinaria resistencia al calor, lo que lo hace ideal para su uso en herramientas e implantes médicos que deben esterilizarse sin riesgo de infección o contaminación por daño térmico.
El tungsteno ofrece una resistencia superior a la radiación, lo que lo convierte en la opción favorita en entornos médicos. Dadas sus numerosas ventajas, los médicos de todo el mundo utilizan cada vez más el tungsteno.
Alta resistencia
El acero al wolframio es uno de los metales más duros y ofrece una gran resistencia física y a los impactos, lo que lo hace adecuado para aplicaciones de gran esfuerzo.
La resistencia a la tracción de este metal es extremadamente alta, lo que significa que puede soportar grandes cantidades de tensión sin deformarse permanentemente, un atributo que lo hace ideal para componentes críticos para la seguridad, como piezas de aviones y transportes que deben soportar fuerzas externas sin deformarse permanentemente.
El wolframio tiene una clasificación de 9 en la escala de Mohs, lo que lo hace excepcionalmente resistente a los arañazos. Esto significa que soporta mejor que la mayoría de los metales los entornos abrasivos más duros, como el rectificado y el mecanizado.
El alto límite elástico del tungsteno es otro elemento clave de su durabilidad, ya que muestra en qué punto se detiene la deformación elástica antes de que se produzcan grietas o roturas. Esto prolonga los ciclos de vida útil de los componentes de equipos y maquinaria, al tiempo que reduce las necesidades de mantenimiento y los costes generales asociados a los proyectos a largo plazo.
Alta durabilidad
El wolframio de alta pureza resiste bien en condiciones extremas, gracias a su dureza, estabilidad térmica y resistencia a la calefacción, cualidades que lo hacen indispensable en industrias que van desde la minería hasta la aeroespacial.
El tungsteno es mucho más resistente y duradero que las aleaciones de acero, lo que lo convierte en un material esencial en herramientas y componentes expuestos a fricción o desgaste. Gracias a su increíble resistencia, el tungsteno ofrece una vida útil más larga con menos requisitos de mantenimiento en entornos difíciles.
Las aleaciones se componen de múltiples metales combinados entre sí para producir propiedades que no se encuentran en los metales puros, dando lugar a nuevas características que superan a las encontradas en las formas puras de los mismos. El wolframio puede añadir resistencia y durabilidad al tiempo que aumenta la tenacidad y la dureza, lo que resulta ideal para aplicaciones que requieren gran precisión, como los instrumentos médicos o la munición perforante.
El wolframio es un componente integral de los aceros rápidos para herramientas (HSS), conocidos por su excepcional dureza y resistencia al desgaste. Combinado con otros metales como el cromo, el cobalto y el vanadio, proporciona a los HSS una mayor dureza y resistencia, incluso a temperaturas elevadas.
Alta resistencia al calor
El tungsteno tiene un punto de fusión excepcionalmente alto, y su excepcional resistencia, dureza y resistencia eléctrica permiten utilizarlo para diversas aplicaciones, como filamentos para bombillas, electrodos, piezas de hornos de alta temperatura, así como aleado con acero para producir acero para herramientas de alta temperatura que reduce el coste al tiempo que aumenta la resistencia.
La capacidad del "acero Valiant" para resistir entornos de altas temperaturas se debe a su precisa composición metalúrgica; con elementos de aleación específicos que proporcionan una estructura refinada que minimiza el movimiento de los límites de grano a la vez que mejora la resistencia contra la degradación y la oxidación a temperaturas elevadas, características esenciales que garantizan su eficacia a largo plazo en entornos exigentes a la vez que protegen los componentes críticos.
Comprender la relación entre la resistencia y la tolerancia a altas temperaturas puede ayudar a los ingenieros a mejorar los procesos de selección de materiales y los diseños para su uso en condiciones ambientales extremas. Póngase en contacto con un experto de Ulbrich para obtener más información sobre el uso de aleaciones de tungsteno de primera calidad en proyectos industriales y de ingeniería.
Propiedades no magnéticas
El tungsteno es un metal inerte, ideal para situaciones en las que el magnetismo sería contraproducente, como los escáneres médicos y los dispositivos que requieren material de alta densidad. Además, la superficie del tungsteno, extremadamente quebradiza, puede soportar grandes tensiones mecánicas sin agrietarse, lo que significa que incluso se podrían extraer de él cables finos, como los de las bombillas, sin que se fracturasen.
Las aleaciones de wolframio se presentan en muchas formas y tamaños para satisfacer las necesidades específicas de cada aplicación. Los puntos fuertes del tungsteno son su densidad, dureza y resistencia al calor, aunque su coste tiende a hacerlo más pesado y costoso que otras alternativas como el titanio, el níquel y el aluminio.
Las aleaciones de tungsteno se han creado para satisfacer requisitos específicos, como la resistencia al impacto y a la corrosión. Las barras de tungsteno se presentan en seis aleaciones distintas para satisfacer diversas aplicaciones o procesos; normalmente utilizan agentes aglutinantes de hierro y níquel para mejorar las propiedades mecánicas sin dejar de estar compuestas predominantemente de tungsteno con un contenido de 90-97% que contiene un nivel aceptable de repulsión magnética; la línea Wolfmet se adhiere a las normas ASTM B777-15 y AMS 7725E de no magneticidad.
Bajo mantenimiento
El acero al tungsteno es mucho más resistente y elástico que el aluminio, con una resistencia excepcional a la tensión antes de deformarse o agrietarse bajo tensión. Además, su resistencia a la tracción superior -su capacidad para estirarse o tirar antes de romperse- hace que el acero al tungsteno sea una opción excelente para proyectos que requieren durabilidad a largo plazo.
El tungsteno tiene un punto de fusión excepcionalmente alto, lo que le permite mantenerse estable incluso en condiciones ambientales adversas. Esta increíble durabilidad se traduce en una larga vida útil y menores requisitos de mantenimiento en aplicaciones industriales.
Puede que el tungsteno sea un metal raro, pero sus usos en la vida cotidiana son numerosos y variados. Con una fuerza, durabilidad y resistencia a la corrosión sin parangón, el tungsteno es un elemento indispensable en aplicaciones de ingeniería avanzada. Producido con distintos niveles de pureza, la versatilidad del tungsteno lo hace inestimable para proyectos aeroespaciales y de ingeniería por igual. El carburo de wolframio proporciona diferentes niveles de dureza y resistencia al desgaste. Además, puede mezclarse con cobalto o níquel para aumentar la tenacidad o proporcionar resistencia a la corrosión en entornos difíciles.